
Rocío Jurado, nuestra estrella más internacional, ha atravesado un mal momento a causa de la operación a la que tuvo que someterse en Sevilla, debido a un movimiento brusco durante una actuación. Su último disco, «Rocío de luna blanca», ha vuelto a conseguir, como es habitual en ella, magníficas críticas y rápidamente se han hecho populares casi todas sus canciones.
—Sinceramente, lo he pasado muy mal. La operación no fue demasiado complicada, lo que ocurre es que soy alérgica a ciertos medicamentos y me tenían que hacer pruebas antes de darme la medicación. Ahora parece que todo ha vuelto a la normalidad, espero que no me vuelva a ocurrir.
—Una de tus grandes preocupaciones es que no querías dejar colgada ninguna gala.
—Me considero, ante todo, una profesional y no me parecía bien dejar colgadas a las personas que me habían contratado. No era por el dinero, sino por el hecho en sí. De todas formas, este verano no me voy a dar la paliza que me he dado otros años. Aunque tengo un disco en estos momentos que suena a todas horas y sé que el público quiere escuchar estas canciones en directo, tendrán que esperar un poco. Sé que ellos me comprenden.
—Todas las artistas siempre decís que vuestro último trabajo es el mejor.
—Todas las canciones que ha compuesto José Luis Perales para mí son muy buenas, pero no voy a decir que son las mejores que he grabado en mi carrera. Creo que eso es una tontería, en cada momento haces lo que crees que es lo mejor y unas veces atinas y otras no. Puedo decir con la cara muy alta que todos los temas que he grabado a lo largo de mi carrera son magníficos, de lo contrario no los habría grabado.
—Rocío, ¿qué hay de cierto en lo que se dice de que las folclóricas os lleváis muy mal?
—Son tonterías, muchas veces sois vosotros los periodistas los que os inventáis eso, por ponerte un ejemplo, se ha dicho que Isabel Pantoja y yo nos llevamos a matar, cosa que es completamente falsa. Cuando estaba internada en el sanatorio en Sevilla, ella me llamó para darme ánimos. Estoy convencida de que nadie es la mejor, unas pueden cantar mejor que otras, pero en definitiva, es el público el que siempre dice la última palabra.
—Puede ser como tú dices, pero también es verdad que entre Concha Piquer y tú no hay una cordial amistad.
—Ese es un tema del que no quiero hablar. Los malos recuerdos es mejor olvidarlos y los comentarios que hizo esa señora sobre mí no me merecen ningún respeto. El tiempo, la crítica y el público han dicho si tengo o no tengo voz.
—Siempre te he oído decir que uno de tus grandes deseos sería hacer un buen musical.
—Efectivamente, lo que ocurre es que en España no se suelen hacer comedias musicales que verdaderamente merezcan la pena, como ocurre en Londres o Nueva York. A mí me han ofrecido muchas cosas que, o no merecían la pena, o al final no se han hecho. No descarto la idea de que un día se produzca ese hecho y al fin pueda dar a mi público otra faceta de mi arte.
Pues ya lo saben los productores de teatro, Rocío Jurado está dispuesta a interpretar un buen musical y por supuesto el éxito estaría asegurado, ya que ella cuenta con una innumerable legión de admiradores.